Loïc Movellan, ilustrador residente en París, trabaja como productor durante el día, pero por la noche pone la pluma sobre el papel, lo cual "me ayuda a relajarme y a vaciar mi mente repleta de ideas locas", dice.
He dibujado desde niño. Cuando tenía alrededor de seis o siete años era fanático del anime Dragon Ball, pero no podía comprar ninguna figurita porque gastaba todo mi dinero en dulces y pain au chocolat de la panadería de mi pueblo".
Sin embargo, Loïc decidió no renunciar a sus dulces, en su lugar dibujó a sus personajes favoritos, creando "figuras planas para jugar, me sentí muy feliz con sólo ese pedazo de papel", explica. "Nunca he dejado de dibujar desde aquel día".
Loïc no ha recibido ninguna formación reglada sobre dibujo, lo que es una decisión consciente "porque quería desarrollar la habilidad y el estilo por mi cuenta", dice. El ilustrador ha dominado la creación de sencillas e hilarantes tiras cómicas.
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http://loicmovellan.com/
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